Por Henry Valdez Montero, M.A.
En este artículo titulado (Suelta la vaca que no te deja crecer), me refiero a todas aquellas cosas, bienes, personas u objetos a los cuales nos mantenemos apegados de manera directa o indirectamente que afectan nuestro crecimiento y desarrollo económico, social, profesional y como individuos.
Le llamo vaca al apego a cualquier cosa y no es refiriéndome al animal mamífero y cuadrúpedo indefenso que pasta en el campo, en estos tiempo más que nunca se necesita independencia económica y el despojo de las prebendas, regalos y dádivas, no importando las procedencias de donde lleguen, cuando las personas se acostumbran a depender de una sola fuente es como decir poner todos los huevos en una sola canasta.
Hago esta reflexión refiriéndome a la anécdota de una vaca (en esta ocasión si se refiere al animal cuadrúpedo y mamífero), que era el sustento de toda una comunidad y sus habitantes, donde ellos de la leche que producía la vaca la vendían y con ese dinero compraban otras cosas, pero siempre estaban pendiente solo a la leche que producía dicha vaca.
Sucede que en una madrugada alguien entro a la comunidad y mató la vaca, al día siguiente cuando ellos vieron su vaca muerta también se querían morir, porque ya no tenían de donde sostenerse y no tenían otra fuente de ingresos para mantenerse.
Sucedió que después que se vieron sin su vaca, buscaron la forma de sobrevivir y crear los medios de subsistencia de otros medios y recursos y utilizar su creatividad y para no dejarse morir, es necesaria una interdependencia la cual es un estado donde una persona o grupo de personas, incluyendo sociedades y países completos actúan de manera autónoma, libre y auto-suficientes en donde han llegado a cortar, o por lo menos minimizar los lazos con una figura de sustento ya sean sus padres, amigos, el gobierno, las autoridades ó algún
proveedor.
Cuando hablamos de la independencia personal existen muchas formas de obtenerla y en variadas áreas de nuestra vida. Cuando una persona por deseo propio o necesidad desea ser auto–suficiente y buscar su propia realización bajo sus propios términos ha iniciado un camino del cual a pesar de no ser nada fácil, puede llegar a ser inmensamente enriquecedor y alcanzar sus metas por medio del trabajo, su creatividad y sus fuerzas.
Referirnos a dejar la vaca es como la mujer que es víctima de abuso y maltrato al separarse de su esposo golpeador logra su independencia y como el empleado que deja su trabajo por convertirse en emprendedor también busca su independencia ó el niño quien va a la escuela por primera vez inicia su proceso de independencia al dejar atrás la seguridad de sus padres, el joven quien deja la comodidad de la vida con sus padres para enfrentarse al mundo en busca su auto-realización e independencia en un mundo cambiante y
demandante y por ultimo nos referimos a los aventureros ya sean hombre o mujeres que viajan a otros países sin conocer el lugar, las costumbres, la dieta y ni siquiera el idioma con la intensión de trillar un nuevo rumbo en su vida e independizarse para lograr una meta u objetivo en la vida.
Cuando eres independiente te conviertes en tu propio amo, en el creador de tu propio destino y en el único responsable de tus éxitos y fracasos. Pero, cuando somos dependientes es fácil atribuir nuestros resultados a nuestras circunstancias y a las personas de las cuales dependemos, que por lo general son nuestra pareja y/o padres.
Ser independiente, en sus diferentes facetas, circunstancias y etapas es algo por el cual cada ser humano tiene que atravesar. Unos lo hacen antes que otros, otros lo hacen de una manera simple, otros lo logran con ayuda, otros lo hacen acompañados, ya sea cual sea tu manera de volverte un ser independiente es importante hacerlo ya que te invadirá una sensación de goce y plenitud al saber que tus logros, son TUYOS.
Ser independiente no significa no buscar ayuda, ni de recibirla cuando es ofrecida o requerida, pero sí es la aceptación de que a final de cuentas la decisión final (y sus consecuencias) serán tuyas. Eso puede generar mucho temor e incertidumbre pero al final las recompensas valen la pena.
Por eso que con mucha razón y experiencia vivida les digo a mis amigos, alumnos, compañeros y colegas.
Suelta la vaca que no te deja progresar y usar tus recursos y creatividad para llegar a ser quien tú puedes ser.
Es necesario soltar la vaca para ver el poder que tenemos nosotros mismo para auto realizarnos y sostenernos sin depender de algo o alguien.
El autor es: Mercadólogo, economista y escritor
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